»Dios amó tanto a la gente de este mundo, que me entregó a mí, que soy su único Hijo, para que todo el que crea en mí no muera, sino que tenga vida eterna.
miércoles, 4 de abril de 2012
janet aponte orellana guerra espìritual
Inclinó su hombro para cargar.
Hermanos, tomad como ejemplo de paciencia y aflicción a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.
Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos.
¿Aceptaremos el bien de Dios y no aceptaremos el mal? En todo esto Job no pecó con sus labios.
Aarón guardó silencio.
El SEÑOR es; que haga lo que bien le parezca.
Echa sobre el SEÑOR tu carga, y El te sustentará; El nunca permitirá que el justo sea sacudido.
Ciertamente El llevó nuestras enfermedades, y cargó con nuestros dolores;
Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y HALLAREIS DESCANSO PARA VUESTRAS ALMAS. Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera.
Gn. 49:15 Stg. 5:10 I Co. 10:11 Job. 2:10 Lv. 10:3 I S. 3:18 Sal. 55:22 Is. 53:4 Mt. 11:28-30